ANTONI GAUDI: UN ESTILO INIGUALABLE.
Por Sunia Santisteban
La obra del arquitecto catalán Antoni Gaudí va más allá de cualquier estilo o intento por clasificarla. Su sello eminentemente personal, se sustenta sobre el prodigio de la naturaleza. Nacido en MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA Y DOS, (en Riudoms o Reus, Cataluña), este hombre poseía un sentido innato de la geometría y el volumen. “Los paraboloides, hiperboloides y helicoides, variando constantemente la incidencia de la luz, tienen una riqueza propia de matices, que hacen innecesaria la ornamentación y hasta el modelaje”, afirmaba. De su mente surgieron: La Sagrada Familia, el Parc Guell, la Casa Batlló y el Palau de la Música Catalana. Con una visión orgánica de la arquitectura concibió sus diseños de forma tridimensional, toda una novedad para su época. Reacio a dibujar planos, en raras ocasiones elaboró croquis de sus obras, tan sólo cuando se lo requerían instancias oficiales. Antoni Gaudí dedicó los últimos años de su vida a edificar el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia o la Catedral de los Pobres, como es popularmente conocida. En un intento por lograr su propósito llegó incluso a pedir limosna. Concibió la basílica como si fuese la estructura de un bosque, con un conjunto de columnas arborescentes divididas en ramas que sustentan un arreglo de bóvedas de hiperboloides entrelazados. Cuando la luz solar atraviesa los ventanales policromos ubicados en las paredes, se produce un estallido multicolor. La obra de Gaudí es de difícil clasificación. Los expertos afirman que pertenece a la corriente Modernista; eso lo ratifica su afán de renovación, el sentido ornamental y el carácter multidisciplinar de sus realizaciones. La Sagrada Familia, incluida en el Sitio del Patrimonio mundial Obras de Antoni Gaudí, es además, uno de los DOCE Tesoros de España.
Fotos: propias, Sagrada Familia, 23/01/2011. Jornada de puertas abiertas.
La obra del arquitecto catalán Antoni Gaudí va más allá de cualquier estilo o intento por clasificarla. Su sello eminentemente personal, se sustenta sobre el prodigio de la naturaleza. Nacido en MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA Y DOS, (en Riudoms o Reus, Cataluña), este hombre poseía un sentido innato de la geometría y el volumen. “Los paraboloides, hiperboloides y helicoides, variando constantemente la incidencia de la luz, tienen una riqueza propia de matices, que hacen innecesaria la ornamentación y hasta el modelaje”, afirmaba. De su mente surgieron: La Sagrada Familia, el Parc Guell, la Casa Batlló y el Palau de la Música Catalana. Con una visión orgánica de la arquitectura concibió sus diseños de forma tridimensional, toda una novedad para su época. Reacio a dibujar planos, en raras ocasiones elaboró croquis de sus obras, tan sólo cuando se lo requerían instancias oficiales. Antoni Gaudí dedicó los últimos años de su vida a edificar el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia o la Catedral de los Pobres, como es popularmente conocida. En un intento por lograr su propósito llegó incluso a pedir limosna. Concibió la basílica como si fuese la estructura de un bosque, con un conjunto de columnas arborescentes divididas en ramas que sustentan un arreglo de bóvedas de hiperboloides entrelazados. Cuando la luz solar atraviesa los ventanales policromos ubicados en las paredes, se produce un estallido multicolor. La obra de Gaudí es de difícil clasificación. Los expertos afirman que pertenece a la corriente Modernista; eso lo ratifica su afán de renovación, el sentido ornamental y el carácter multidisciplinar de sus realizaciones. La Sagrada Familia, incluida en el Sitio del Patrimonio mundial Obras de Antoni Gaudí, es además, uno de los DOCE Tesoros de España.
Nave principal de la Basílica de la Sagrada Familia
Altar mayor
Nave central
Fuentes: ca.wikipedia.org, Puig i Tàrrech, Armand (2010). La Sagrada Família segons Gaudí. Comprendre un símbol. Ed. Pòrtic, Barcelona. ISBN 978-84-9809-158-8, www.antonigaudi.org.Fotos: propias, Sagrada Familia, 23/01/2011. Jornada de puertas abiertas.
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